martes, 31 de mayo de 2011


Josefina Pelliza de Sagasti nace en Entre Ríos, en 1848. Dos son sus poemarios conocidos: Pasionarias y lirios silvestres; entre sus novelas, destacan: Margarita, La Chiriguana y El César, además, colaboro en revista, abordando temas filosóficos, históricos y educativos.
Se le reconoce un lenguaje inspirado, sensual y elegante. Una muestra son los siguientes versos de Sonámbula:

¿Era un ángel? ¿quién era? Un peregrino
extraviado en el yermo de la vida
o era acaso de un bardo el triste lloro
resonando en las cuerdas de la lira.

Pero, su famoso poema es ¡Muerta!, porque se dice que lo escribió unos días antes de morir (fue como una premonición), en 1888, a sus cuarenta años, y sirvió de inspiración a muchos poetas, un poema bellísimo, y con enorme fuerza poética:

Muerta

¡Se oscureció mi vida en la tiniebla!
Sentí como si el mundo vacilara
y me erguí cual se yergue la serpiente
que frío hierro mata.
Entreabrí la ventana: no hallé cielo;
volví los ojos: no encontré la tierra;
palpé bajo el sepulcro de mi pecho
y me ericé de frío: ¡estaba muerta!

(Un hallazgo que nos regalo Nelda Lugrin, de Concordia, Entre Ríos)